Entradas

Mostrando entradas de abril, 2025

La melancolía de Zidane - Jean-Philippe Toussaint

Imagen
  [Traducción Bruno Grossi]   Zidane miraba el cielo de Berlín sin pensar en nada, un cielo blancuzco matizado de nubes grises con reflejos azulados, uno de esos cielos de viento inmensos y cambiantes de la pintura flamenca. Zidane miraba el cielo de Berlín sobre el estadio olímpico la noche del 9 de julio de 2006 y experimentaba con una intensidad desgarradora la sensación de estar allí, simplemente allí, en el estadio olímpico de Berlín, en ese instante preciso, la noche de la final del Mundial de fútbol. Sin duda la noche de aquella final no fue más que forma y melancolía. Primero, inmediatamente, la forma en estado puro: el penal anotado en el minuto siete, un Panenka indolente que tocó el travesaño para cruzar la línea y salir de la portería, una trayectoria de billar que coqueteó con el disparo legendario de Geoff Hurst en Wembley en 1966. Pero aún era solo una cita, un homenaje involuntario a un episodio legendario de la Copa del Mundo. El verdadero gesto de Zidan...

Una mística oscura. Conversación entre Pablo Farrés y Germán Prosperi

Imagen
  Germán Prósperi: Cuando uno lee tus libros, proceso que en cierta forma yo he hecho en sentido cronológicamente inverso porque he leído primero tus últimos textos y luego he comenzado a ir hacia atrás, advierte de inmediato una suerte de nexo indisociable entre escritura y psicosis. Sin embargo, esta primera constatación pareciera enseguida complejizarse, porque si bien es posible detectar una influencia de la teoría del deseo esquizofrénico elaborada por Deleuze y Guattari, sobre todo en El Anti-Edipo , también hay ciertos indicios de una influencia lacaniana, por ejemplo un capítulo de Las pasiones alegres que se titula “El nombre del padre” o la noción de “fantasma psicótico” que pareciera remitir al seminario 3 de Lacan o la noción de “Una-Madre” en vez de “Un-Padre”, etc. Esta coexistencia de Deleuze-Guattari y Lacan es por demás interesante ya que en general se trata de autores que suelen considerarse en veredas opuestas. Mi pregunta entonces es: ¿qué es lo que te ha inter...

El chaquito - Rafael Arce

Imagen
  La temperatura estival propia de la zona se demoraba, atenuada por vientos inéditos, benévolos. De otro modo, un mediodía hubiera sido inadecuado. Del almacén Verona me habían hablado, o había sabido de su existencia, recién en mis últimos años en la ciudad. Del Chaquito (o Chaco Chico), del Monte Zapatero, tenía nociones más antiguas e igualmente vagas. Podía jactarme (pero esa jactancia escondía una vergüenza) de haber llegado al Monte y a la playa por vía fluvial. Fue lo que le dije cuando ella me preguntó. Solamente en kayak pero en mi tono de voz hubo, creo, neutralidad. En todo caso, podía escucharlo sin jactancia, como mera información. Pero solo ella podía hacerlo . Probablemente, con otro me habría abstenido de comentarlo. Puede decirse que literariamente está poco explotado. Un extraordinario cuento de Carlos Catania transcurre en el Chaquito, “El hueco”, publicado en La ciudad desaparece en 1966. Creo recordar, o tal vez imagino, que en “La laguna” de Sergio Delgad...